30 junio
Quien liga las manos de Jesús
#Mis Manos las liga Satanás por medio de los pecadores
#¡Oh, vosotros, que me amáis, soltad con vuestro amor mis Manos atadas!
#Soy echado de las iglesias y de los corazones
#Abridme pues el corazón, vosotros que me amáis
Dice Jesús:
"¿Sabes qué quieran decir mis Manos atadas? ¿Sabes quién me las ata? ¿Sabes por qué tanto dolor en mi mirada, tanto abatimiento en mi Rostro? ¿Sabes qué es lo que pido a quienes saben mirarme?
Mis Manos las liga Satanás por medio de los pecadores
Mis Manos las liga Satanás por medio de los pecadores. No has entendido mal. Te lo repito: las liga Satanás por medio de los pecadores.
Dirás tú: "Pero, señor, ¿cómo puede ser eso siendo Tú Dios?" Yo soy el Dios de la Misericordia y del Perdón, Yo soy el Dios poderoso, el Padre de las gracias. Mas el pecado paraliza el Poder de mis gracias, mi Misericordia y mi Perdón. Porque, si bien soy Misericordia, Gracia y Perdón, soy también Justicia. Doy, por tanto, a cada uno lo que se merece. Y si tú recapacitas con justicia, debes proclamar que siempre os doy más gracias de las que merecéis.
es aún más difícil que una autoridad se mantenga honesta,
dentro de las mil formas de honestidad, que no que un rico
se salve
Si a una autoridad de la tierra, siquiera fuese un simple agente municipal, le hicieseis las ofensas que a Mí me hacéis, seríais castigados hasta con la pérdida de la vida. Y las autoridades son pobres hombres como vosotros que son autoridad hasta tanto Yo permito que lo sean para mérito vuestro, para prueba suya y, casi siempre, para su castigo. Vuestro mérito: obedecer y ejercitar la paciencia. Su prueba: no abusar del poder, no ensoberbecerse con él creyéndose semidioses o dioses al ver a las turbas prontas a la menor indicación suya y a gritar: "Hosanna". Uno solo es Dios. Su castigo: porque es aún más difícil que una autoridad se mantenga honesta, dentro de las mil formas de honestidad, que no que un rico se salve. Por eso su gloria humana es la única gloria que tienen. Aquella, la eterna, muy pocas autoridades la alcanzan.
Ahí tienes qué significan mis Manos atadas y quiénes son
los que las atan con los cordeles del Mal:
Satanás y sus hijos.
Las continuas culpas, cada vez más pérfidas, que cometen los hombres por instigación de mi Enemigo y vuestro, atan mi Misericordia, mi Gracia y mi Perdón. Ahí tienes qué significan mis Manos atadas y quiénes son los que las atan con los cordeles del Mal: Satanás y sus hijos. Mis Manos, por el contrario, querrían verse libres para perdonar, medicinar, consolar y bendecir.
¡Oh, vosotros, que me amáis, soltad con vuestro amor
mis Manos atadas!
¡Oh, vosotros, que me amáis, soltad con vuestro amor mis Manos atadas! Reparad, reparad, queridos míos, amigos e hijos míos amadísimos, el ultraje inferido a las Manos de vuestro Dios, de vuestro Padre, de vuestro Redentor. El amor es llama que funde las cadenas y quema las ligaduras devolviendo la libertad a mis Manos atadas. Vosotros que me amáis, apiadaos de mi dolor y compadeceos de vuestros hermanos leprosos a los que sólo mis Manos pueden sanar.
Mi mirada está saturada de dolor por todos los ultrajes
que se me dirigen en el Sacramento y en mi Ley
Mi mirada está saturada de dolor por todos los ultrajes que se me dirigen en el Sacramento y en mi Ley. Ley pisoteada, Sacramento profanado. ¿Los has leído? ¿Lo has sentido? ¿Lo has advertido? Siempre atentando contra el altar del Sacramento. ¿No ves en ello el signo de Satanás? Y piensa esto para tu consuelo: Cuando, entre las ruinas de una iglesia destruida, es posible encontrar intacto el Copón que me contiene y recogerlo con los debidos honores, es porque un corazón, o muchos corazones, a distancia del lugar dañado, pero en adoración ante Mí-Eucaristía, desviaron con su oración el golpe directo de Satanás. Esas hostias que salváis, ¡oh almas humildes y amorosas que rogáis por mi Sacramento!, producen en vosotros los mismos frutos de una Comunión de amor.
Aparece el cansancio en mi Rostro porque compruebo
cada vez más hasta qué punto fue en vano mi muerte
para tantos hombres
Aparece el cansancio en mi Rostro porque compruebo cada vez más hasta qué punto fue en vano mi muerte para tantos hombres; porque me percato cada vez más de que nada -ni palabras, ni milagros, ni castigos, ni gracias- sirve para hacer pensar que Yo soy Dios y que sólo en Dios se encuentran el Bien y la Paz. Cuando uno se encuentra cansado y afligido, los que le aman le dan su afecto para consolarle y descanso para su alivio. Esto es lo que a ti te pido y lo que pido asímismo a los que me aman.
Soy echado de las iglesias y de los corazones
Soy echado de las iglesias y de los corazones. Cuando peregrinaba por la tierra no tenía el Hijo del Hombre una piedra de su propiedad sobre la que posar su cabeza. Mas ahora que los corazones de los hombres son de piedra, ¿tengo acaso donde reclinar la cabeza? No. Sólo algún raro rarísimo corazón fiel. Los demás son hostiles a su Amigo y Redentor.
Abridme pues el corazón, vosotros que me amáis
Abridme pues el corazón, vosotros que me amáis. Dad asilo a vuestro Dios que llora de dolor por la humanidad culpable. Confortad al que se da a sí mismo en sacrificio eterno sin ser comprendido. Yo, Jesús, vendré con todas mis gracias y haré del corazón fiel un pequeño Paraíso".
C-43. 133-135
A. M. D. G.