Si hay diez justos ¿les perdonarás?
#Es imposible describir lo que vi. No hay palabras #Ciertamente, aunque viviera mil años, jamás olvidaré la belleza de esta visión intelectual
#En suma, me siento bajo el Ojo de Dios
#Paraíso. Quiere decir: vivir contemplando siempre aquel Sol Uno y Trino.
Dice también (Jesús):
Al decir: diez justos, no pretendí dar a entender que ha
de quedar a salvo el lugar donde haya diez justos
"Al decir: diez justos, no pretendí dar a entender que ha de quedar a salvo el lugar donde haya diez justos. Mas, con todo, se puede entender sin error que si se reúnen en oración diez almas justas y generosas con un fin santo para implorar piedad por un lugar, Yo no desatenderé su plegaria. ¿No dije que escucharé las peticiones hechas por varias personas en mi Nombre? Pues bien, mis palabras y mis promesas no han de fallar.
Mas, ¿serán constantes en la fe, en el sacrificio, en la pureza espiritual y en la pureza de intención las personas que hayan de reunirse ahora para rogar por esta intención? Si así fuese y lo fueran como deben ser: verdaderos sacerdotes, (son sacerdotes aquellos que ruegan y se inmolan por sus hermanos) Yo los bendeciré y les concederé lo que pidan en mi Nombre."
Escribo esta mañana mientras le espero a usted (P. Migliorini), ya que ayer me encontraba tan extenuada que no podía hacer más.
Es imposible describir lo que vi. No hay palabras
Es imposible describir lo que vi. No hay palabras. Mientras Jesús hablaba yo veía; mas no puedo expresar, de forma que otro lo contemple, cuanto mi mente vio. Aun siendo torpísima para el dibujo, podría diseñar esto: Bastaría trazar tres círculos concéntricos con un punto en medio. Mas esto nada diría por cuanto faltaría la luz y a la vez la intuición de las relaciones entre los tres círculos y el punto que los centra. Por lo que resultaría una representación muerta cuando, en realidad, es tan viva, operante y beatífica.
Ciertamente, aunque viviera mil años, jamás olvidaré la
belleza de esta visión intelectual
Ciertamente, aunque viviera mil años, jamás olvidaré la belleza de esta visión intelectual. Ella para mí será ayuda, consuelo, fortaleza, defensa, todo, en fin, en todas las circunstancias. Y es igualmente imán ultrapotente que me atrae hacia Sí y me infunde un ansia indescriptible de alcanzarlo. Paréceme vivir bajo el sol. Mas ¿qué digo el sol? El sol resulta un astro apagado y frío en comparación con el Fuego divino engastado en la profundidad del Empíreo, a la vez tan alejado y tan próximo...
Sí. Tengo la impresión de su desmesurada lejanía a través de la cual recorre el Universo todo que se baña y vive de su Luz y, al mismo tiempo, siento que todo ser, el mío especialmente, que por la bondad de Dios se me ha pertimido gozar de esta dicha, no admite comparaciones y está próximo a este Punto de Vida que es Dios y bajo su rayo que lo tiene recogido, resguardado, vital, al modo de una campana de cristal que cobija una delicadísima planta. (Y con esta anodina comparación sé que lo estropeo todo; pero no doy con otra mejor.)
En suma, me siento bajo el Ojo de Dios
En suma, me siento bajo el Ojo de Dios. Y es ésta una sensación de gozo, de calor, de fortaleza, de paz infinita, indescriptible, letificante. Vivir así bajo la incomprensible Perla (como justamente la denominó mi Maestro) de la Belleza divina, Perla que concentra en un único insostenible Esplendor a las Tres divinas Personas y hace de Ellas una Unidad de Luz Divina, es una beatitud que anula cuanto he sufrido y me queda por sufrir...
Paraíso. Quiere decir: vivir contemplando siempre
aquel Sol Uno y Trino.
Ahora comprendo verdaderamente qué quiera decir: Paraíso. Quiere decir: vivir contemplando siempre aquel Sol Uno y Trino.
C-43. 141-143
A. M. D. G.