13 julio.

 

 

El reino de Dios está en vosotros

 

 


 

#Mi reino no es de este mundo   

#Sed diligentes. No digáis: "Tanto he trabajado ya que ahora voy a descansar"   

#"Estos son los que vinieron de la gran tribulación" La cruz es escalera, la cruz es ala, el dolor es medicina, el dolor es purificación.   

#nunca la caridad va separada del sufrimiento, porque, al ser cosa santa, desencadena las iras del Enemigo

 


 

Dice Jesús:

"El reino de Dios está en vosotros. Nunca el hombre entendió esta verdad.

Cuando Yo vivía, creyó que mi reino fuese un reino de poder y hasta de superpoder temporal. Esto hizo que se agrupasen muchos en torno mío a la espera de un buen porvenir.

Mas Yo no mentí ni engañé. Mi Palabra era clara. Prometía un reino e, incluso, marcaba el camino para poseerlo. Este camino no era ni es el trillado de ordinario por quienes escalan un poder. Era más bien el camino opuesto. Y, precisamente, porque era opuesto, no lo siguieron con generosidad sino pocos.

 

Mi reino no es de este mundo

 

Mi reino no es de este mundo. El mundo en el que moráis es la aroma por la que podéis subir a mi mística nave. Mas no es empresa fácil subir por una maroma. Es menester para ello estar ágiles, ligeros, sanos, no padecer vértigos como suceda a los que abusan de placeres. El vicio impide la subida, las enfermedades lo mismo e, igualmente, el apego excesivo a las cosas de la tierra y la pereza espiritual.

Estad sanos de alma y, puesto que resulta casi imposible al hombre mantenerse completamente sano, cuidad al menos de combatir desde su inicio vuestras enfermedades espirituales.

 

Sed diligentes. No digáis: 

"Tanto he trabajado ya que ahora voy a descansar"

 

Sed diligentes. No digáis: "Tanto he trabajado ya que ahora voy a descansar". No, hijos a los que aguardo en la gloria. Mi reino entraña tal dicha que ninguna fatiga es demasiado larga y ardua para conquistarlo.

Cuando obráis conforme a mi Ley está ya en vosotros mi Reino y lo sentís por la paz que en onda inexhausta fluye en vosotros. Esta paz no es la mísera paz humana asechada por tantas cosas y personas enemigas. Es la Paz verdadera: es mi Paz.

 

"Estos son los que vinieron de la gran tribulación" 

La cruz es escalera, la cruz es ala, el dolor es medicina, 

el dolor es purificación.

 

Se dice en el libro de Juan: "Estos son los que vinieron de la gran tribulación". He aquí la ayuda más valiosa para conquistar mi Reino eterno de Paz. Yo os abrí sus puertas con mi gran tribulación, mas vosotros, discípulos fieles a los que llamo al Reino, no sois más que el Maestro y debéis serviros de la misma arma para subir hasta Mí. La cruz es escalera, la cruz es ala, el dolor es medicina, el dolor es purificación.

Tan sólo queda todo cumplido cuando se bebe  -para impedir que Yo la bebe-  la amargura de las amarguras: la hiel y el vinagre, reparando así el odio y el pecado y purificando del odio y del pecado a las almas de los hermanos. La hiel me fue dada por el odio que me maldice después de cuanto Yo di; el vinagre, por el pecado que agria mis sarmientos hasta tornarlos silvestres. La caricia hace dulce la hiel y agradable el vinagre, ya que la caridad repara y redime.

 

nunca la caridad va separada del sufrimiento, porque,

al ser cosa santa, desencadena las iras del Enemigo

 

Ahora bien, nunca la caridad va separada del sufrimiento, porque, al ser cosa santa, desencadena las iras del Enemigo. Por el contrario,  nunca el sufrimiento va separado de la gloria por cuanto Yo soy justo y doy a quien da."

C. 43. 176-178

A. M. D. G.