30 julio 1943
Isaías. Contemplemos hoy cuanto hace
referencia a los más pequeños
#La causa primera del mal: haber quedado sin Dios
#El mundo muere por no tener ya a Dios por Amo
#Con todo, ya veis, hijos queridos, qué cosas sabe hacer por vosotros vuestro Dios
#Haced que se encienda de gozo el Rostro de vuestro Jesús y el de sus verdaderos discípulos
Dice Jesús:
Contemplemos hoy cuanto hace referencia a los más pequeños. Digo Yo por boca de Isaías, haciendo hablar o hablando a los humildes:
"Hemos tenido amos que, sin Ti, Dios nuestro, nos han esclavizado. Haz que tan sólo por Ti hayamos de acordarnos de tu Nombre. El que muere torna a vivir; no resucitan los gigantes; por eso Tú los visitaste, los exterminaste e hiciste desaparecer por completo su memoria.
Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras de ti las puertas, escóndete por un poco de tiempo hasta tanto haya pasado la indignación. He aquí que el Señor saldrá de su morada y visitará la iniquidad del que está contra El sobre la tierra.
En aquel día visitará el Señor con su espada acerada, grande y fuerte al Leviatán, serpiente tortuosa.
Con palabras bárbaras, con lengua extranjera hablará el Señor a este pueblo al que dije: Aquí está mi descanso, confortad al cansado, este es mi refrigerio. Mas ellos no quisieron escucharme.
Y dijo el Señor: Porque este pueblo se me acerca con su boca y me honra con sus labios, pero su corazón está lejos de Mi y me rinden culto con preceptos y enseñanzas de hombre, por esto Yo excitaré de nuevo la admiración de este pueblo con prodigio grande, estupendo; perecerá la sabiduría de los sabios.
Porque el opresor ha desaparecido, el escarnecedor ha sido aniquilado también los que tramaban el mal. Que hacían pecar a los hombres con sus palabras, tendían engaños a quien les reprendía y se alejaban sin razón del justo. Por esto dice el Señor: No será confundido Jacob ni se ruborizará ahora su rostro sino cuando vea a sus hijos, obra de sus manos; en su seno glorificará mi Nombre. Y los que erraban con el espíritu aprenderán la ciencia y los murmuradores aprenderán la Ley.
En aquel día cada uno arrojará sus ídolos de oro y de plata que os hicisteis con vuestras manos para pecar y Asur caerá al filo de una espada que no es de hombre y la espada que no es de hombre lo destruirá y huirá no ante la espada y su juventud pagará el tributo"
La causa primera del mal: haber quedado sin Dios
La causa primera del mal: haber quedado sin Dios. No habéis querido tener a Dios por Amo, y amo benigno, y así habéis tenido amos que han rebajado vuestra libertad de hombres a la mortificación de los esclavos. Como a esclavos os han prestado, vendido y tomado de nuevo; entregados a la muerte como esclavos riendo y engordando a costa de vuestro dolor.
El mundo muere por no tener ya a Dios por Amo
El mundo muere por no tener ya a Dios por Amo; vosotros, en particular, morís por no haber querido a Dios por Amo paternal. ¡Quisiera Dios que ahora os volvieseis a El!
En su Nombre está la salvación. La vida es Vida en su
Nombre y la muerte resurrección. Aquel que vive
en el Señor no muere eternamente
En su Nombre está la salvación. La vida es Vida en su Nombre y la muerte resurrección. Aquel que vive en el Señor no muere eternamente. Los gigantes, o sea, los que levantan su poder soberbio de carne y sangre contra el Cielo con los que atraen el rayo divino y caen fulminados para no levantarse más. Lo tuvieron todo en la tierra ya que para ellos tan solo regía la ley de la carne y de la sangre. De aquí que haya acabado para ellos el reino eterno y luminoso del espíritu. Acaba ya desde esta tierra en donde le dieron muerte con su propia mano y también allí donde no hay límite de tiempo ni penetran las almas muertas.
Cuando suene en el Cielo la hora de la ira y descienda
la Justicia para herir, tened por norma la Caridad y la
Prudencia.
Cuando suene en el Cielo la hora de la ira y descienda la Justicia para herir, tened por norma la Caridad y la Prudencia. Retiraos, en vez de cacarear como pollitas que divisan al milano; retiraos, en vez de murmurar, pues sólo a Dios incumbe juzgar, y pedid al Señor Caridad y Prudencia para obtener que el Mal sea vencido por el Bien y triunfe la Paz en los Estados, en las instituciones y en los corazones.
Para castigar no necesita Dios de vuestros consejos.
Sabe cuando y cómo debe usar de la espada para matar
al resurgente eterno
Para castigar no necesita Dios de vuestros consejos. Sabe cuando y cómo debe usar de la espada para matar al resurgente eterno, el Monstruo que os seduce, contrapuesto al Resurgente divino que os salvó y os salva con su Sangre y al que, con harta frecuencia, grandes y pequeños del mundo no saben prestar oídos, sordos a mis desconsoladas plegarias en demanda de asilo para el fatigado del Amor, para vuestro Jesús que sufre de un amor perfecto siempre rechazado.
¡Oh, si vinieseis a Mí con vuestro corazón, hijos tan
tiernamente amados por vuestro Dios. Padre vuestro
y Hermano!
¡Oh, si vinieseis a Mí con vuestro corazón, hijos tan tiernamente amados por vuestro Dios. Padre vuestro y Hermano! ¡Todo le arrancaríais a mi Amor si vinieseis a Mí con vuestro amor! Todo, porque constituye para Mí sumo dolor no poder cubriros de dones en esta y en la otra vida. Hasta el culto que me tributáis ha perdido mucho de mi signo y asumido formas humanas más en consonancia con vuestro torpe modo de obrar tan torpemente humano.
Volved, hijos, a la Fuente, a esa Fuente de la que brota
Vida. El transcurrir de los siglos no la envejece porque
el Tiempo es un instante frente a mi Eternidad.
Volved, hijos, a la Fuente, a esa Fuente de la que brota Vida. El transcurrir de los siglos no la envejece porque el Tiempo es un instante frente a mi Eternidad. Lavad en esa Fuente vuestra alma y sumergid en ella vuestro espíritu para que vean. Para que vean a Dios y los prodigios que realizo con el fin de excitar vuestra admiración de modo que vuestra mente se despoje de la ciencia de los sabios, ciencia falaz, y aprenda la Ciencia de Mí que soy la Sabiduría de Dios.
Con todo, ya veis, hijos queridos, qué cosas sabe hacer
por vosotros vuestro Dios
Con todo, ya veis, hijos queridos, qué cosas sabe hacer por vosotros vuestro Dios. Vi la aflicción de mi pueblo elegido, aquella que ya conocéis por haber caído sobre vosotros y aquella otra que habríais conocido, dispuesta como estaba ya en la sombra, de no haber Yo proveído.
Mas, ¡ay también de vosotros si de nada sirviese
la lección! ¿Cómo podría estar siempre acudiendo,
proveyendo y perdonando?
Mas, ¡ay también de vosotros si de nada sirviese la lección! ¿Cómo podría estar siempre acudiendo, proveyendo y perdonando? ¿Cómo, si hasta vosotros os hicisteis opresores? ¿Cómo, si también vosotros llegasteis a ser escarnecedores? ¿Cómo, si vosotros os alejasteis también del justo que os habría de aconsejar para vuestro bien y urdisteis contra él vuestras celadas? El es portador de mi Palabra, él y sus ministros. Y en mi Palabra está la verdadera Ciencia y la verdadera Ley que proporcionan el Bien.
Haced que se encienda de gozo el Rostro de vuestro Jesús
y el de sus verdaderos discípulos
Haced que se encienda de gozo el Rostro de vuestro Jesús y el de sus verdaderos discípulos. Y de igual modo se encenderán aquel Rostro y aquellos rostros cuando os vean triunfar sobre todas las idolatrías del sentido, del dinero y del orgullo que siempre os atormentan.
Quiénes sean los "Asur" lo entiendes por ti. Mas a
todos digo: procurad no haceros merecedores con
ellos de la espada que no es de hombre
Quiénes sean los "Asur" lo entiendes por ti. Mas a todos digo: procurad no haceros merecedores con ellos de la espada que no es de hombre. No. Sed buenos. Vuestro Dios no quiere mostraros la espada que castiga sino que quiere abriros sus brazos que únicamente saben amar, bendecir y deciros: "Venid, hijos, a descansar en la Paz de vuestro Padre".
C. 43. 222-225
A. M. D. G.