12 agosto 1943

 

 

Cuando la naturaleza humana, 

haciendo  honor a su origen, 

acierta a vivir  sobrenaturalmente, 

se encumbra sobre la angélica

 


 

#¿Cuando sucede esto?  

 #cuando la criatura se crucifica a sí misma por amor del Maestro crucificado, se hace entonces motivo de admiración para las jerarquías angélicas 

  #En torno a mi Cruz, lo mismo que en torno a mi cuna, había escuadras de ángeles adorantes  

#En el coro de las voces que salen de la tierra para el Cielo faltan las que den gracias

 


 

Dice Jesús:

"Cuando la naturaleza humana, haciendo honor a su origen, acierta a vivir sobrenaturalmente, se encumbra sobre la angélica siendo motivo de admiración para los propios ángeles.

 

¿Cuando sucede esto?

 

¿Cuando sucede esto? Cuando la criatura vive abismada en mi Voluntad, abandonada por entero a Mí, no viviendo, no amando, no obrando sino para Mí y conmigo. Entonces eleva su carne a un grado no concedido a los ángeles, los cuales no conocen las apetencias de la carne, careciendo del mérito de sojuzgarla.

 

cuando la criatura se crucifica a sí misma por amor 

del Maestro crucificado, se hace entonces motivo 

de admiración para las jerarquías angélicas

 

Así pues, cuando la criatura se crucifica a sí misma por amor del Maestro crucificado, se hace entonces motivo de admiración para las jerarquías angélicas, las cuales no pueden sufrir por mi amor ni crucificarse a sí mismas como Jesús, Redentor del mundo e Hijo del Eterno.

 

En torno a mi Cruz, lo mismo que en torno a mi cuna,

había escuadras de ángeles adorantes

 

En torno a mi Cruz, lo mismo que en torno a mi cuna, había escuadras de ángeles adorantes por cuanto la cuna y la cruz constituían el alfa y omega de mi misión de Redentor. Mas, en torno a mis pequeños crucificados, que se inmolan en aras de un perfecto amor, hay también escuadras de espíritus angélicos porque me ven a Mí en vosotros que morís por Mí.

Déjame, por tanto, hacer. Hacer hasta el fondo. Dentro de poco Yo seré para ti padre, madre, además de hermano y esposo. Dentro de poco ya no me tendrás sino a Mí. Ven, es duro el golpe; pero estás advertida de ello y sé generosa. Déjame hacer. Nada hago que no tenga la rúbrica del amor. Sé como corderito recién nacido entre mis manos de buen pastor. Si tu Pastor te hace comer esta hierba amarga, ésta precisamente, es porque te quiere dar un puesto más bello en su Corazón. Y no tengas miedo. Yo te ayudaré. Siempre te ayudo, ya lo ves.

Tengo necesidad de tu dolor, dolor absoluto, completo, profundo. No sabes tú qué valor haya de tener en mis manos. Cuando lo sepas, dirás que valoré al mil por cien tus sufrimientos y me darás gracias por ello. Dámelas ya desde ahora con confianza y con amor.

 

En el coro de las voces que salen de la tierra para

 el Cielo faltan las que den gracias

 

En el coro de las voces que salen de la tierra para el Cielo faltan las que den gracias. Viene a ser ésta una nota muda, lo que está muy mal, y constituye un desmerecimiento grande para la estirpe de Adán que, no obstante ser amada y beneficiada en sumo grado por el Dios Uno y Trino, no sabe dar gracias. Mas si ha de perdonarse esto a los analfabetos del Amor, no cabe hacerlo así con aquellos a los que el mismo Amor instruye. Cuando un niño pequeño comete un yerro o es un pobre ignorante el que lo comete, se le disculpa; pero no así cuando el que comete ese mismo yerro es un adulto o una persona culta.

Tú estás siendo educada por el Maestro y no debes faltar a sus enseñanzas. Te he hecho crecer con mi amor al modo como se hace desarrollar a un niño con la leche. Sé fiel al Amor en todas, en todas, en todas las cosas."

C. 43. 253-254

A. M. D. G.