15 agosto
Tus escrito se han de usar así
#La parte que es tuya habrá de tener el acostumbrado valor informativo
#La parte que es mía y va separada de la tuya, ha de tener un valor formativo porque en ella está la voz evangélica #Guerra significa ruina de muchos, aunque también utilidad de muchos
#Pobres hombres, ¡qué malvados sois!
#La paz santa y verdadera no la desean todos
Dice Jesús:
"Tus escrito se han de usar así:
La parte que es tuya habrá de tener el acostumbrado
valor informativo
La parte que es tuya habrá de tener el acostumbrado valor informativo para la curiosidad de los hombres que siempre quieren sondear los secretos de las almas.
La parte que es mía y va separada de la tuya, ha de tener
un valor formativo porque en ella está la voz evangélica
La parte que es mía y va separada de la tuya, ha de tener un valor formativo porque en ella está la voz evangélica, sea cual fuere el modo de llegar a vosotros, siempre tiene valor de formación. Aun cuando el modo o los modos de llegar al alcance de las almas no sean tal vez de esta tierra, ella sigue siendo lo que es sin que pierda nada de su valor.
Me sentía reacio a dar la nueva fórmula de plegaria para hoy porque sé que es menos sentida aún que aquella de junio (5 de junio). Entonces se pedía que las bombas respetasen las casas y habitantes de Viareggio y esto era un motivo al alcance de la obtusidad y miedo humanos. Lo que hoy se pide es algo más importante y universal y, resulta doloroso constatarlo, no es universalmente deseado ni apetecido siquiera por la totalidad del reducido núcleo de Viareggio.
Guerra significa ruina de muchos, aunque también
utilidad de muchos
Guerra significa ruina de muchos, aunque también utilidad de muchos. Y, ante la utilidad propia, el hombre hace caso omiso de la utilidad colectiva. Es tan poco lo que entre vosotros os amáis, que vivís encerrados cada uno dentro del propio egoísmo y armados de aguijones contra el vecino. Por eso, si la anterior plegaria era poco sentida por el espíritu y sí sólo por la carne que se estremecía por el miedo de sí misma y de la propiedad de las casas, ésta aún se pronuncia con un espíritu más sordo.
Y una cosa es tregua y otra paz. Paz quiere decir concordia
externa e interna, buscada y querida con mirada y afecto
espirituales.
No es así como se obtiene lo que se pide. Llegará la tregua de las armas, porque debe llegar, mas no será sino una tregua. Y una cosa es tregua y otra paz. Paz quiere decir concordia externa e interna, buscada y querida con mirada y afecto espirituales.
Si supieseis venir a Mí con los labios y el alma limpios y
encendidos de verdadera caridad, os concedería esta paz
Si supieseis venir a Mí con los labios y el alma limpios y encendidos de verdadera caridad, os concedería esta paz. Os la daría salvando todos los obstáculos que interpusiese el Mal para impedirla, puesto que Yo soy el Vencedor eterno. Mas entre los muchos que hoy rezarán en las iglesias por esto, pocos, muy pocos, poquísimos tendrán los requisitos que hacen poderosa la oración. Es ésta una verdad dolorosa y que produce espanto; pero que de nada sirve ocultarla ya que el mal persiste por más que se oculte.
Pobres hombres, ¡qué malvados sois!
Pobres hombres, ¡qué malvados sois! Si hiciese retumbar esta verdad desde los cielos, el hombre se daría por ofendido de ella lo mismo que los fariseos cuando les desenmascaraba descubriendo sus ocultos vicios.
La paz santa y verdadera no la desean todos
Mas es como digo. La paz santa y verdadera no la desean todos. Sois tan obtusos y estáis tan amasados de malos apetitos, que no alcanzáis a percibir el tono de la verdad que Uno superior a vosotros os descubre. Mas la verdad es ésa, no puede ser otra, porque verdad no hay más que una sola.
Mas son tan pocos los justos en contraposición a la
muchedumbre de injustos... Satanás tiene un número
inmenso de hijos y servidores. El Hijo de Dios, en cambio,
tiene un número insignificante de verdaderos hijos
y de siervos verdaderos.
Siempre estamos en aquella plática. "Si hubiera diez justos..." Mas son tan pocos los justos en contraposición a la muchedumbre de injustos... Satanás tiene un número inmenso de hijos y servidores. El Hijo de Dios, en cambio, tiene un número insignificante de verdaderos hijos y de siervos verdaderos. Y en este desequilibrios radica la causa de vuestra ruina."
C. 43. 262-264
A. M. D. G.